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Mostrando entradas de marzo, 2020

Las revoltosas (III)

S imone se declaró atea, libre y mujer como a los catorce años, Gabriela abandonó la tierra que amaba cansada de tener que demostrar que una mujer es mucho más de lo que le decían que tenía que ser la mayoría de los hombres de su tiempo y Frida tuvo que soportar dolores que seguro hubiesen hecho llorar al más macho de los hombres. Simone tuvo que escribir libros para explicarles a los hombres aquello que tanto les costaba entender, Gabriela de no dejar de ser profesora en aquel valle donde educaba, seguro no sería recordada por nadie, Frida tuvo que aprender a ponerse de pies al menos tres veces para demostrarse a sí misma que una mujer elige cómo es que quiere ser vista. Las tres tuvieron que aprender a vivir sus vidas de espaldas a lo que las sociedad de su tiempo decía que era lo correcto, aprender que la mujer no nace sino que se hace, que no    traer hijos al mundo puede ser un dolor pero también una decisión personal, que no es verdad que las mujeres nacen para ser prin

La memoria del aire en el agua

E ste libro se llama como se llama porque a mi hija le gustan mis historias, pero más le gustan aquellas cosas del zodiaco que yo nunca termino por entender. Ella me confirmó que yo soy acuario y que mi signo es aire (insisto que no entiendo), feliz se define a sí misma como una piscis (que esta vez sí es agua). Entonces yo tenía un montón de cosas que le quería contar cuando tuviera la edad y el tiempo para escuchar o leer los aburridos recuerdos con que nos suelen dar la lata las personas mayores cuando nos empiezan a considerar grandes. Mi hija es una de las pocas personas de mi entorno más cercano a las que algo le interesan las cosas que he insistido en escribir durante treinta años, lo que no deja de ser para mí un tremendo honor porque, ocurre que yo a mi hija la admiro mucho; primero por ser mujer, segundo por ser tan responsable con aquello que se compromete, tercero porque adora a los niños y a las niñas y de algún modo también ha orientado su vida con el fin de prote

Las revoltosas (II)

E n materia de pensamiento, expresión de las emociones y denuncia de las injusticias hay revoltosas que si bien muy poco estudiadas, aportaron demasiado a las conversaciones que se dan hoy en día en las sobremesas. No pocas mujeres se declaran feministas sin conocer que esta historia es tan antigua como es larga, que es preciso estudiarla, reflexionar y debatir acerca de cómo mantener sus ideas tan frescas como vigentes. La historia de nuestras revoltosas puede ser entendido a través de olas (sí, como aquellas del mar que vienen, van y vuelven a venir) cuatro las más importantes o notorias. La primera a partir de la Revolución Francesa en que se establecieron los Derechos del hombre como si las mujeres no hubieron sido dignas de tener derechos (allí hubo revoltosas bregando por ser reconocidas y aceptadas como parte activa de la revolución). Lento pero seguro, las ideas de la contraparte que permitió el lucimiento de los grandes líderes hasta mediados del siglo XIX. La segunda buscó

Las revoltosas

S e da por sentado de que entre quienes se revelan a la desidia de cierto tiempo hubo, hay y habrá mujeres, sin embargo es necesario hacer ciertas aclaraciones: aún en el más libertario de los movimiento son los nombres de los hombres los que continúan prevaleciendo, los revoltosos por revoltosos que sean fueron bastante machistas, cosa que al parecer a partir de hace poco ha ido cambiando; lo importante es que revoltosas ha habido, y al decir verdad todavía no son estudiadas y menos comprendidas como han sido su contraparte en términos de género. Ninguna revolución podía haber sido posible sin el aporte de las mujeres, incluso si ellas tan solo se hubiesen ocupado de los quehaceres mientras sus hombres permanecían largas horas estudiando o redactando aquellos manifiestos con que pasarían a la Historia; Historia que no cabe duda sería distinta si hubiésemos preservado la impronta matriarcal de las tribus originarias. En asuntos políticos, tanto como los científicos y en los artís