El pasado 26 de junio, subí una entrada bajo la etiqueta de homenajes a propósito de los cien años del nacimiento de Salvador Allende; sin embargo el verdadero homenaje se lo quiero brindar durante este mes de septiembre y no solo a él sino a todos aquellos que rozaron la posibilidad de un Chile distinto. Con sumo respeto, este será un especial de primavera, un auto regalo de un tiempo que no cabe duda no será fácil de borrar. Hace 38 años del triunfo de La Unidad Popular , a 35 del golpe de estado que nos legó el país en que estamos viviendo. Todo parece hace tanto tiempo y sin embargo ya ven; las heridas aún no se cierran. Aquellos años seguro fueron una fiesta para los que no tenían nada sino su conciencia social, limpia e incorruptible. Un único renacimiento del acervo cultural de un pueblo que no pudo nunca terminar de entender como la alegría se fue convirtiendo en odio y como una revolución que sin derramamiento de sangre sorprendía al mundo entero terminó siendo una sarta