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Mostrando entradas de octubre, 2012

Perdición (1944)

A veces sucede que uno se sienta a ver una película con la única ambición de entretenerse un buen rato y es sorprendido por obras capitales de un genero determinado que no solo entretienen, si no que también asombran y dejan pensando más allá de lo que dura la película. Tal es el caso de Perdición , obra de arte  de la intriga y el suspenso; lo que se conoce como cine negro. Es una de las notables cintas dirigidas por Billy Wilder  uno de los directores más reconocido de la cinematografía norteamericana. Trata de una esposa ( Barbara Stanwyck ) que manipula vilmente a un obnubilado vendedor de seguro ( Fred Mc Murray )  con el fin de matar a su marido y cobrar un seguro. Todo se complica en un ir y venir de situaciones dignas del cine de los grandes del suspenso cuando aparece un detective ( Edward G. Robinson ). Las actuaciones principalmente de estos tres protagonistas son memorables, el guión, basado en un hecho real está convenientemente escrito y cuenta con una música que no

Maus

E ntre mis placeres culpables confieso la lectura de libros de cómic....sorprendente ¿no?; pues sí, desde siempre me llamaron la atención y ajeno a cualquier prejuicio los reconozco como obras literarias por lo que voy a comentar acerca del que hasta ahora me ha provocado más cosas. Maus del dibujante norteamericano Art Spiegelman . Es una obra desconcertarte, poco o nada tiene que ver con lo que la mayoría reconocería como un cómic. Cuenta la historia de su padre sobreviviente del holocausto nazi a la vez que el proceso de trabajo en que se elaboró el mismo libro que estamos leyendo. Maus (ratón en alemán) es una fabula moderna, una lección de historia más humana que universal en que la obsesión nacionalista tan propia de los años de la segunda guerra es retratada mediante una visión antropomórfica de distintas etnias y nacionalidades: judíos que son ratones, alemanes que son gatos, polacos representados como cerdos, ranas en el caso de los franceses, ciervos para los suecos y

La nueva trova chilena (II)

B ueno; como había antes dicho, ha sido un placer escuchar a los nuevos cantautores chilenos. Es cierto que algunos como es normal destacan sobre el resto que en sí es muy similar pero aunque sonaran parecidos mientras digan algo que suenen igual. Nano Stern: Con cinco discos editados es el que suena más global (de los que yo al menos he escuchado); es un destacado instrumentista y posee una voz tan agradable al oído que sus composiciones para no pocos pueden resultar un bálsamo para diluir tanto ruido sin sentido. Voy y vuelvo (2007) no es su primer disco pero sí es un trabajo más completo en relación a su primer trabajo homónimo; Necesito una canción y Dos cantores las más famosas, y sin embargo como no reparar en la belleza de Un gran regalo y de Calma que es de aquellas canciones que nos mantiene con los pies en la tierra. Están también Los espejos (2009) su tercer álbum y bueno Las torres de sal (2011) el último con canciones como la que le da el titulo al disco o  El río de lo

Perros ovejeros y coyotes

D e un tiempo a esta parte cada vez que hay elecciones me siento un tanto aislado. De ninguna forma soy de aquellos que pregonan que no les interesa la política, ni pretendo dármelas de elegido que disfruta el jactarse de que no existe nadie ni nada que lo identifique. Al contrario, me complica de sobre manera y hasta me preocupa no ser ya capaz de ver alguna diferencia entre los políticos. Ellos se supone que piensan distinto pero al momento de gobernar se parecen demasiado. Discuten de vez en cuando acaloradamente en el Congreso, se insultan y a veces hasta pierden su supuesta compostura y hasta se dan de golpes...pero cuando no los estamos viendo, cuando comparan las ganancias de sus repentinamente pujantes negocios, a la hora del café, en el almuerzo e incluso minutos antes de entrar o salir del trabajo es muy poco lo que los separa. Recordé aquella serie de dibujos animados que nosotros veíamos en Latinoamérica en los años ochenta que se llama   El perro ovejero y el coy