R ichard Attenborough , el director de esta película, vio en este proyecto primero un anhelo, luego una extensa espera y finalmente un camino a seguir para sus futuras producciones. Es una de aquellas obras que además de inspiradoras son un verdadero éxito en países con culturas muy diferentes. La necesidad permanente de no pocos espectadores de asistir a la narración audiovisual de aquellas vidas que alcanzan un estatus de "ejemplares", el carácter de mega producciones que precisan de la colaboración de dos o más naciones para su esperada culminación hacen de esta película una de las cumbres del cine biográfico. Ben Kinsley revelándose a los amantes del buen cine como uno de los más excelsos actores de la época con un papel que parece hecho para su lucimiento, un potente grupo de actores secundarios y un metraje digno de la vida que se nos quiere contar (3 horas y 8 minutos aproximadamente) en la que podemos como curiosos occidentales conocer tanto modos como tradic