Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de septiembre, 2022

Escrito en el trigo (Patricio Manns)

 

La biblioteca en el escritorio

D e tanto en tanto; preferentemente cada cambio de estación del año, me gusta sacar todos los libros que se han ido juntando en la única biblioteca que me puedo permitir. Un espacio habilitado en la parte de abajo de un escritorio muy lindo que mi hermana mayor una vez me regaló. Seguro que ella cree que hace muchos años que no lo uso. Que en alguno de los lugares donde anduve quedo abandonado debido a mi intención de no llevar conmigo peso innesesario. El hecho es que aún lo conservo. Aún guardo libros que voy a leer, algunos que ya leí y otros que, también de tanto en tanto, voy sacando para poner otros y no incurrir en aquello de conservar más de lo que necesito.  Es muy emocionante para mí quitarles el polvo, hojearlos nuevamente uno por uno y recordar lel momento o la razón por la cual todavía lo conservo. Limpio y hojeo libros muy antiguos, clasicos y ediciones de los mejor vendidos. Más de alguna lectura sorpresiva y no pocos libros que siguen siendo lecturas pendientes. Pequeña

Los idiotas (1998)

L ars von Trier es un director provocador. Fundador, junto a Thomas Vinterberg, de un movimiento cinematográfico (Dogma) muy difícil de seguir y que sin embargo fraguó escuela. En esta, su segunda película, pone en aprietos al espectador que no pocas veces piensa en dejar de mirar su propuesta artística. Un grupo de jóvenes que avecindados en una casa en venta se propone contactar con el idiota interior que todos llevamos dentro. La propuesta es arriesgada pues algunas veces se atreven a llevar su experimento a lugares públicos como un restaurante o una piscina. Choca ver a buenos actores pasando de la citada idiotez a la "normalidad" más absoluta. Llama a reflexión, no cabe duda, pero también ofende y desafía abiertamente los hipócritas usos sociales que nos definen como civilizados. El personaje de Karen (Bodil Jorgensen) somos nosotros invitados al juego. Ella es la única (lo entenderemos al final de la película) en correr el riesgo de no querer volver a una

Los inevitables encuentros (III)

T odavía hay quienes creen que somos distintos, quienes piensan que se justifican nuestras fronteras, quienes se sienten orgullosos de pertenecer y poder demostrar que somos superiores a estos otros o estas otras. También hay quienes pregonan que somos hermanos y que lo que haces a un hombre se lo haces a la humanidad, pero tanto unos como otros cada vez debiesen ser menos. Las culturas han comenzado un viaje que inevitablemente culminara en un encuentro; encontraran los conquistadores que aquellos a quienes conquistan terminaran por conquistarlos con sus riquezas culturales. Llegará un día en que los cantos que podemos oír cantar a los esclavos serán los cantos que de una u otra forma cantaremos todos. Las religiones dejarán de tener sentido y morirán más gentes por los excesos de las civilizaciones que por el hambre o las guerras. Entiendo muy bien que esto que escribo pueda parecer a quienes leen solo cándidas fantasías. Pero este siglo que vivimos, la manera de pensar que ha p