Ir al contenido principal

Ser niños

En este momento…en este preciso momento un niño se las arregla para ganarle la diaria batalla a aquella persistente enemiga que es la miseria. La enfrenta resentido, incrédulo ante las bonitas palabras de sus maestros, receloso acerca del futuro y con una carencia enorme de bienes materiales que sabe ajenos por más que los necesite.

Otros miles de niños arrastran a sus confundidos padres por los adecuados caminos de la redención ante el imperdonable pecado que constituye el abandono. Administran la culpa sin comprender del todo el por qué sus padres tienen que darles todo lo que ellos no necesitan.

Siempre ha sido así, niños que esperan y niños que exigen. La culpa no es de los niños que criados en la cultura del consumo aguardan que el amor se les demuestre por medio de gestos materialmente concretos. No hay diferencia, no es mal que afecte solo a ricos ni algo que hoy sea lejano para los padres. Muchos padres están intentando enmendar el pasado en el presente de sus infantes.

No queremos que sufran lo que nosotros, es que son niños, la ley del canje…tú me das y yo te doy, te cambio notas por objetos y buena conducta por dinero. Así muchos están enseñando la mecánica del merecimiento. Hoy los niños están convencidos que lo merecen todo. Y muchos de sus padres creen que amarlos es darles todo.

Creo en una visión bastante más reposada de lo que es ser niños. Usar la imaginación, jugar a los abrazos y en el valor de ganarse las cosas sin esperar que estas sean en pago por hacer lo que se debe hacer.

Puede ser que más de alguien difiera de mi pensamiento, ante ellos me reconozco más bien convencido que inflexible en mis ideas. Los niños deben ser niños, no jugar a ser grandes. Sobran las oportunidades en que ellos ponen en práctica los malos ejemplos que de nosotros los adultos aprenden.

No me refiero a aquel antiguo juego de jugar a que se es grande, me refiero a renegar de ser niños.

Dicen que los niños hoy nacen así, yo más bien creo que es así como los estamos educando. Les heredamos más que nunca nuestras frustraciones, nuestra ignorancia y nuestros errores al vivir la vida.

Por suerte que no siempre es así y todavía existen niños que a pesar de los tiempos que vivimos actúan con la inocente pureza que nosotros a diario vamos ensuciando. Los niños no son hoy más o menos respetados que ayer, cada tiempo tiene su dosis de crueldad. Es cruel enseñarle a los niños que lo pueden tener todo, es irresponsable enseñarles que tener es ser…el niño del que comencé escribiendo en esta reflexión no espera regalos ningún día del año, espera una respuesta que le explique al final del día porque la infancia está determinada por los adultos que nos toca y nos tocará conocer.

No todos los niños son felices me comento una amiga, yo le conté que según creo, los niños tienen una maravillosa capacidad de adaptación…ellos saben siempre como hallar la felicidad, somos los adultos los que a veces les entorpecemos el camino.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Quelentaro

Q uiero hacer este homenaje ahora porque no quiero llegar con él cuando sea tarde. Remontarme a la infancia porque aunque resulte inapropiado, una irresponsabilidad de mis padres o quién sabe qué cosa....lo que más recuerdo de mi infancia son las coplas del dúo Quelentaro . Eran un conjunto en un comienzo (cosa que muy pocos en realidad saben) después pasaron a ser un dúo y gran parte de los años ochenta era solo Gastón el que cargaba con el pesado nombre del arte que para tantos de nosotros es enorme debido a que su hermano Eduardo tuvo que partir en palabras propias de ellos, a lejanas tierras. La poesía y la música de Quelentaro vienen de la tierra, se conecta con aquellos que a tumbos hemos ido caminando la vida. Su arte es decididamente más comprometido y menos masivo que el de otros cantores populares....pero este homenaje no es por lo artístico; es porque aunque ellos no lo saben del todo; mis propios caminos se han topado algunas veces con los de ellos. Cuando E...

Casas de cartón

N o tenía la menor idea de que Marco Antonio Solis había grabado una versión de la canción, ni que vendieran casas de cartón para que jueguen los niños que pueden comprarlas. El caso es que buscando información sobre el (a estas alturas) innegable aumento de casas de cartón, palos y latones alzadas en la principal avenida de la ciudad en que transito, no me fue de ningún modo posible, evitar recordar una de las canciones de aquel furibundo, y dulzón, cantautor que fue el venezolano Alí Primera. Tenemos como nunca a vista y paciencia de quien use sus ojos para ver lo que no conviene de ningún modo mirar... a personas durmiendo en la calle. Puede ser que como una inevitable consecuencia de aquello del individualismo usted me pueda decir que son desarraigados, drogadictos y vagos que se niegan a ser responsables como aparentemente usted y yo lo somos pero, resulta que me he acercado a algunas de estas casas que juntas, frente a las universidades y clubes de gente bien, conforman fami...

Tres hermanos (1981)

C uando terminamos de ver una película que nos tuvo cautivados más por sus silencios que por sus contenidas actuaciones. Cuando oímos sorprendidos que los problemas de la justicia, las reivindicaciones sociales y del amor definitivamente parecen ser siempre los mismos y aún así, sentir un extraño estremecimiento minutos después de haberla terminado de ver; pienso que es una película que hay que ver. Tres hermanos es una película sobre hombres, sobre la manera en que sobrellevamos nuestras emociones. Dirigida por Francesco Rossi y protagonizada por Phillipe Noire , Michelle Placido y Vitorrio Mezzogiorno en los roles de los tres hermanos que vuelven al pueblo donde crecieron con motivo de la muerte de su madre. Allí les espera su padre, un conmovedor Charles Vanel , que parece ser, junto a su nieta (la que viaja con  su padre; el menor de los hermanos) los únicos que realmente sienten la perdida. Uno juez, el otro trabajador social en un hogar de niños con  diversa...