Ir al contenido principal

El camino

Me alejé de ti, no por falta de cariño, sino buscando algo que en la apacigüedad de tus besos yo no hallaba. Me fui camino inseguro buscando el olvido teniendo la certeza de tu abrazo. Me descuide, no lo niego y fui apretando ortigas donde tu amor cristiano me daba espigas. Me moldeaste la ternura y con paciencia esperaste el brotar de un te quiero de mi estrecha boca; sin embargo, me fui de ti a un rumbo distante de tu cariño y me hice piedra de pura inseguridad y falta de paciencia para demostrarte mi cariño…y tuve miedo, tanto miedo de perderte. Pero vino el camino exigiendo ser recorrido y yo me mostré cobarde, sin hacer nada para protegerte de mi frío actuar con respecto a ti; me valí de tu paciencia y ese modo tan dulce que tú tienes de comprender mis cosas, para seguir rumbo distante buscando excusas para no amarte…me arrimé al calor de antiguos afectos; abrigada mi espalda con el húmedo poncho que es la noche, entonces me acordé de la tibieza de tu pecho, del umbral de tu cuerpo noble, pero no fui a ti en el obstinado deseo de mostrarme fuerte con respecto al sufrimiento, y aunque muriera por dentro, para ti ni una palabra que delatara en mí debilidad.

Yo sé que desde hace mucho tiempo te debo mis manos para que arranquen los frutos que maduran de tus sueños, la sangre vegetal de mi cuerpo que en el vientre dará brote a nuestro amor de un bello modo nacido.

Te debo todo eso y es mucho más lo que te debo, pero el camino se alarga y me distancio más de tu amarme sin condiciones, me hundo en errónea lucha por mantener altivo mi orgullo y tú apenas recriminas mis demoras y has creado un lenguaje nuevo para conjugar mis ausencias…hago uso de este breve tiempo de verdades para distanciarme un poco de mis miedos y embriagarme de ti.

Me traiciona mi destino de vagar solo en busca de concretar los sueños; tengo mi último grito anudado en la garganta y cansado del duro combate lo consagro a ti.

Quiero morir con tu nombre en mis labios…yo quiero morir con tu nombre en mis labios, quiero morir…yo quiero morir con tu nombre en mis labios.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Quelentaro

Q uiero hacer este homenaje ahora porque no quiero llegar con él cuando sea tarde. Remontarme a la infancia porque aunque resulte inapropiado, una irresponsabilidad de mis padres o quién sabe qué cosa....lo que más recuerdo de mi infancia son las coplas del dúo Quelentaro . Eran un conjunto en un comienzo (cosa que muy pocos en realidad saben) después pasaron a ser un dúo y gran parte de los años ochenta era solo Gastón el que cargaba con el pesado nombre del arte que para tantos de nosotros es enorme debido a que su hermano Eduardo tuvo que partir en palabras propias de ellos, a lejanas tierras. La poesía y la música de Quelentaro vienen de la tierra, se conecta con aquellos que a tumbos hemos ido caminando la vida. Su arte es decididamente más comprometido y menos masivo que el de otros cantores populares....pero este homenaje no es por lo artístico; es porque aunque ellos no lo saben del todo; mis propios caminos se han topado algunas veces con los de ellos. Cuando E...

Casas de cartón

N o tenía la menor idea de que Marco Antonio Solis había grabado una versión de la canción, ni que vendieran casas de cartón para que jueguen los niños que pueden comprarlas. El caso es que buscando información sobre el (a estas alturas) innegable aumento de casas de cartón, palos y latones alzadas en la principal avenida de la ciudad en que transito, no me fue de ningún modo posible, evitar recordar una de las canciones de aquel furibundo, y dulzón, cantautor que fue el venezolano Alí Primera. Tenemos como nunca a vista y paciencia de quien use sus ojos para ver lo que no conviene de ningún modo mirar... a personas durmiendo en la calle. Puede ser que como una inevitable consecuencia de aquello del individualismo usted me pueda decir que son desarraigados, drogadictos y vagos que se niegan a ser responsables como aparentemente usted y yo lo somos pero, resulta que me he acercado a algunas de estas casas que juntas, frente a las universidades y clubes de gente bien, conforman fami...

Tres hermanos (1981)

C uando terminamos de ver una película que nos tuvo cautivados más por sus silencios que por sus contenidas actuaciones. Cuando oímos sorprendidos que los problemas de la justicia, las reivindicaciones sociales y del amor definitivamente parecen ser siempre los mismos y aún así, sentir un extraño estremecimiento minutos después de haberla terminado de ver; pienso que es una película que hay que ver. Tres hermanos es una película sobre hombres, sobre la manera en que sobrellevamos nuestras emociones. Dirigida por Francesco Rossi y protagonizada por Phillipe Noire , Michelle Placido y Vitorrio Mezzogiorno en los roles de los tres hermanos que vuelven al pueblo donde crecieron con motivo de la muerte de su madre. Allí les espera su padre, un conmovedor Charles Vanel , que parece ser, junto a su nieta (la que viaja con  su padre; el menor de los hermanos) los únicos que realmente sienten la perdida. Uno juez, el otro trabajador social en un hogar de niños con  diversa...